I FESTIVAL
DE CUENTOS DEL VIENTO
Dicen, que las palabras vacías se las
lleva el viento y que el viento inventa con ellas historias y cuentos.
Que lo cuentos viajan de boca en boca
y de pueblo en pueblo
y que van vistiendo al alma de
sueños.
Hoy, viene a vernos el viento
Para llevarnos volando
Esta historia comenzó una mañana de Junio de 2018, cuando el
nombre del Festival de cuentos del Viento se despertó en mi cabeza de forma
repentina y desaparecieron todas las
dudas. A partir de este momento fue cobrando vida un precioso proyecto que iba
encajando por si solo y daba aún más sentido a este maravilloso lugar en donde habito.
Marco Flecha, Narrador, aventurero y compañero de oficio, al que admiro por su trayectoria, por su inocente ilusión que me contagia y por cómo vive la profesión, me bridó todo el apoyo moral que necesitaba y ofreció además el apoyo de la Cháchara cuentos donde también está su compañera Ángeles Fernández, a la que valoro enormemente por su visión práctica, su trabajo y su amor a la profesión.
Por otro lado, el Ayuntamiento de Conil y en concreto Curro, ofreció la logística y apoyo publicitario para desarrollar un proyecto auto gestionado y confió 100 por cien en la iniciativa.
La Pintora Conileña Lola Miralles acepto pintar el
cartel del Festival, entonces pude ver la primera imagen real que me ilusionó aún
más para continuar.
El objetivo de éste proyecto es mezclar diferentes artes con
el cuento, siendo el cuento el eje principal, como portador de historias
lejanas y cercanas que van y vienen como el viento, siempre presente en esta
zona. Y así, acercar el cuento a la calle y abrir una inquietud local tanto de público
como de posibles narradores futuros. El motivo fundamental de éste Festival es el
amor por ésta disciplina artística basada en la palabra.
A partir de aquí, el trabajo fue multiplicándose día a día,
porque era una incógnita saber que repercusión tendría y se fue gestando un
planteamiento cargado de actividades diferentes donde las piezas fueron
apareciendo y colocándose poco a poco en la realidad, descartando y creando continuamente
piezas de un puzzle de actividades.
La Artesana Liz acepto la gestión del Mercado Creativo, un entorno que
da sentido y enmarca los cuentos contados en la calle y su buena gestión se
hizo visible.
Mientras tanto, comenzamos a buscar a los Narradores que
vendrían a éste primer Festival y nos encontramos con la grata sorpresa de tres
confirmaciones impresionantes: Carolina Rueda, Momi Ogalla y Juan Gamba. A los que admiro
enormemente como Narradores y como personas.
Horas de Ordenador, horas de gestión, horas de paseos por
Conil y un sinfín de esas cosas incontables que ocupan todo tu tiempo…. Carteles,
logos, cartas, reuniones y charlas con colegios, Cultura, librerías, editores,
artesanos, pintores y músicos merchandising, compras, billetes y preparaciones
interminables. Un Festival de cuentos con fecha y una responsabilidad
maravillosa que me ha sumergido durante todos estos meses en una fantasía de
cuentos.
Los últimos días fueron aún más inquietantes, pero
comenzaron a surgir colaboradores espontáneos y se fueron implicando cada vez más.
El Tiempo y el Viento es aquí todo un Dictador así es prevenimos diferentes espacios uno para la lluvia, otro para el viento de levante y un tercero para el viento de poniente.
Los Narradores habían llegado y comenzamos a convivir en este
lugar tan cerca del mar donde todo comenzaba a cobrar sentido, convirtiéndose en
realidad.
El viernes fue un día completo, aunque las cosas parecían salir
bien, hubo muchas bajas, de artesanos, colaboradores y apoyos.
Y el tiempo
amen
azaba con una lluvia fuerte que no vino. Comenzamos a contar cuentos por la Mañana en el Colegio público del Colorado. Por la tarde seguimos en la Biblioteca con una preciosa función a cargo de Momi Ogalla y Juan Gamba. Y Momi inauguró los cuentos para adultos en la sala de exposiciones donde la Pintora Conileña, Lola Miralles, había preparado su exposición “De Momento”. Allí, Momi Ogalla nos encantó con sus Idas y Vueltas, con esa narración llena de alma y de anécdotas, tan cercana a lo social.
azaba con una lluvia fuerte que no vino. Comenzamos a contar cuentos por la Mañana en el Colegio público del Colorado. Por la tarde seguimos en la Biblioteca con una preciosa función a cargo de Momi Ogalla y Juan Gamba. Y Momi inauguró los cuentos para adultos en la sala de exposiciones donde la Pintora Conileña, Lola Miralles, había preparado su exposición “De Momento”. Allí, Momi Ogalla nos encantó con sus Idas y Vueltas, con esa narración llena de alma y de anécdotas, tan cercana a lo social.
Terminamos
la noche en la sala del Bar “la Casa Inquieta” con la sesión Golfa de cuentos
en la que participamos todos, Momi Ogalla, Sandra Cerezo, Juan Gamba, Marco
Flecha y Ángeles Fernández.
La primera sesión de cuentos en la calle fue a las 12:30.
Momi, Marco y yo disfrutamos de esa plaza llena de familias.
Los músicos de calle comenzaron a tocar a medio día y dieron
un toque festivo a este día que termino con viento de poniente. Pero pudimos
realizar por la tarde, Ángeles Fernández, Lola Jiménez. Marco y yo, la sesión de cuentos
Ilustrados dedicada a la Librería María Zambrano en el escenario exterior antes de
que el frio se llevara al público que aparecía siempre a hora del cuento como
salido de ninguna parte.
Ya por la noche, Juan Gamba se dejó la piel en su
espectáculo de Adultos, “Crónica de Sucesos” donde hubo cola para comprar
entrada. Un espectáculo de Narración con
un estilo inquietante que te deja perplejo por la capacidad física y narrativa
llena de personajes diferentes, un estilo que nunca le había visto a Juan
Gamba, que nos tiene acostumbrados a sus cuentos cómicos.
Terminado el Sábado sin Momi y con la recién llegada
Carolina.
Solo quedaba un día, el Domingo y por la mañana comenzamos con la
primera sesión infantil a taquilla, Carolina rueda y Juan Gamba. Un lleno
absoluto y asombroso. Y a la vez Marco flecha impartía el Taller de cuentos en
la Chanca de Conil.
Por la tarde y después de comer, estaba prevista la ruta de
cuentos familiar, que por un momento pensamos que fallaría por el frio y porque
se veía poca gente a las 5 de la tarde pero a las 6 empezaron a llegar poco a poco al cementerio y después
del cuento de Carolina, nos fuimos caminando en ruta hacia el pescador del Mar,
haciendo cuatro paradas para contar cuentos.
Terminó la noche con cuentos para adultos, con la sabrosa función
de Carolina rueda, siempre exquisita en su descripción sutil y entrañable, con
las hiladas historias adaptadas de su espectáculo “Cuentos con las manos en la
masa” donde los artesanos estaban también invitados a participar de ésta última
noche.
Pero el final del domingo, aún no había acabado, quedaba el
micrófono abierto y el cierre musical con cuencos de cuarzo. Entonces
si, con las luces apagadas y las velas encendidas, cerramos el Festival.
Todo había terminado satisfactoriamente y el lunes por la Mañana contamos de nuevo en un Colegio, Carolina, Ángeles,
Marco, y yo una buena y variada función para los más pequeños del cole.
Viento.
Esta experiencia me da y nos da la información de cómo mejorar la segunda edición, como llegar al público, a un público que está deseando escuchar cuentos y no lo sabía.
Gracias a todos los que se han implicado en el proyecto, a
los que lo han ido descubriendo y saboreando, al público que aparecía a la hora
en punto, a los colaboradores y apoyos espontáneos y a las bajas y errores que
enseñan tanto, a todos los que en fin apoyan la continuidad del segundo
Festival de Cuentos del Viento de Conil, Gracias.
Gracias de todo corazón a cada uno de los Narradores por aportar sus cuentos y su alma a éste primer Festival.
Gracias a:
Y Gracias, a la
ciudad de Conil y a la comarca de Janda, por abrir su escucha a los cuentos.