viernes, 21 de junio de 2013

MI PRIMER MARATÓN DE CUENTOS EN GUADALAJARA

Fotografía: Juanjo Palacios

Calles Enteladas


Con muchas ganas asistí a mi primer Maratón de Guadalajara, ¡ya era hora!!. Y como  primera vez deseada que fue, uno tiene todos los receptores a flor de piel. … por eso aquí comparto  mis impresiones…. las de la primera vez… esa impresión que quizás no es la acertada, pero que es la primera.

El Maratón de cuentos de Guadalajara  ante todo merece la pena conocerlo, pero lo que tengo claro es que con una sola vez no basta.
Palacio del Infantado

En las Cenas Juanjo Palacios (Fotógrafo) a la Izquierda.

Como un ratoncillo perdido en un cuento de gatos, paseé por tanta cuentería, donde los cuentos sonaban a todas horas y a veces parecía uno estar tras un escaparate.



Alicia Remesal Inaudita 2013 Palacio de Mendoza
Intentando escuchar y ver más de lo que es posible, intenté en todo momento calmar el ansia disfrutando de la Feliz compañía con la que llegué, Carloco, Juanjo Palacios (Fotógrafo de nuestro viaje), Alicia Remesal, Jesús Buiza, Ana Bel Gandullo, Puri Crochet y May, todos en furgoneta para llegar a las 19:00h al Palacio Mendoza donde actuaba de Inaudita nuestra compañera  de FINOS Ali, que contó con la sabiduría, dulzura y  dignidad que le caracteriza.

Kolumelah
Muchos cuenteros preparados para ver a los Inauditos que empezaron contando para un público infantil casi inexistente, varios niños desperdigados entre público ... un clima frío en general que me recordó a un multitribunal, difícil en particular para alguno de los cuentos, como cuentos para bebes y niños pequeños. Algunas actuaciones sorprendentes por el poco realismo que aportaron y otras agradecidas a pesar de la dificultad del público que desde luego participaba y apoyaba a los Narradores. Me sorprendió Aurora Maroto.

Por la noche, por primera vez escuchando la Maratón en el Palacio del Infantado, un macroconcierto de cuentos, una carrera de fondo donde en vez de antorcha se pasa el micro.
Juan Gamba

Amalialu Posso Figueroa.
Yoshihira hioki
Un lugar con capacidad de unas mil personas o más a mis ojos, donde  grandes cuenteros a los que admiro perdían la gran energía que poseen entre tantos oyentes, donde puedes ver de seguido a muchos de los más grandes, donde algunos tienen al público admirado, donde otros tienen grandes amigos que les apoyan con aplausos y silbidos, donde actuaciones inesperadas y desconocidas sorprenden de pronto (como las simpáticas  Som 3D3),  cuentos difíciles de escuchar…, cuentos a estilo pregón, cuentos a estilo Heavy Metal,  cuentos sobre enfatizados, cuentos sin sentido, cuentos erotizados, cuentos de cuevas y mas cuevas, cuentos que mejor no haber escuchado nunca, cuentos…
Cuentos Dibujados

Y casi todos los cuentos traducidos al sordomudo por una traductora simultanea, convertidos  a texto en un pantalla gigante y dibujados por diferentes pintores para ser colgados en un tendedero de imágenes de cuentos, un espacio descontextualizado pero mágico…donde en muchos momentos se echaba de menos una salita pequeña…¡¡¡benditas salitas pequeñas!!!!


Y en las noches Fuera de Palacio, charlas con cuenteros que te dejan perplejo. Y sin querer, te encuentras admirando  a aquellos que se ven grandes desde fuera pero a los que no conoces por dentro.

Kapilo en el Salón Chino
Para dormir, las colchonetas del Albergue, que como en el camino de Santiago duermes junto a personas que te cruzarás después en los caminos cuenteros.

Mandosinni cantando
Por la mañana en el salón chino escuché las historias Africanas de Kapilo,  al me hubiera encantado entender por su naturalidad, pero no, era imposible,… su idioma Africano era traducido al inglés y al español y a duras penas conseguí transportarme a su cultura … Por la tarde Mandosini y Pedro Espí en el patio del Palacio de Mendoza, si consiguieron hacerme viajar con su música y sus voces al África más profunda, aunque Mandosini  parecía una pieza de museo sacada de su lugar de origen…ver a aquella mujer dando saltos y escuchar el arco con la calabaza y las voces, me sacaron sin duda de Guadalajara.

Jesús Buíza en la Chimenea 
En La Chimenea de los cuentos... contamos todos un cuento corto para niños….la esperaba más cálida, en cambio esa pequeña carpa blanca, en medio del parque…y sin chimenea…los cuentos a duras penas se mantenían en el aire. Pero me encantó el detalle de la estrella de cristal que te dan cuando cuentas y la mujer que conducía el espacio que era hogareña y diferente…quizás ella era la chimenea...el caso es que  me recordó a una profesora que tuve en el Internado de Santa María del  Camino…


La feria de libros, como todas, pero con el sonido amplificado de los cuentos de la Maratón sin descanso, allí  cambié unas palabras escritas por otras que me regalaron y compre…y compre… y me sumergí un rato.



Y ...se  acercaba la hora de contar en el Palacio del Infantado…entonces fue cuando pensé que se me olvidaría el cuento…aunque con los nervios compartidos me repetía lo que nos repetimos siempre:

A) con lo bien que estoy en mi casa que hago yo aquí....
B) a disfrutarlo que si tu disfrutas el público disfruta también.
Dos frases que suelen estar extrañamente unidas en éstos casos…y en muchos otros.

Las 3:00 de la mañana, micrófono puesto, ese que había pasado como una antorcha de cuento en cuento y…no fue para tanto, contenta, que ya es mucho. Fuimos los últimos en contar en el gran escenario…
Pepe Pérez
Como hay poca gente a eso de las 4:00 todos pasamos a la entrada a un rincón muy acogedor…allí  disfruté más, los cuentos estaban más cerca. .. 
Para terminar “los microcuentos”... a los que no llegué despierta y por lo visto según algunos son lo mejor de la Maratón, porque se llegan a producir piques improvisados y replicas de cuento contra cuento. ¡Tendré que volver!!....Repetiré para tener una segunda impresión.


Y en mis momentos de reflexión,  me doy cuenta que quiero contar mejor….que quiero seguir contando.

Eso si, después del Maratón uno necesita SILENCIO.
Techo del Palacio del Infantado